SECAS

Paisajes imposibles

Con la profunda voz del clarinete se desgrana la historia de una hermosa pieza de jazz. Con esa voz de ébano y aire, con esa voz de lluvia va contando un tema de ríos y cascadas y de fuentes y de espejos donde la primavera se mira, donde los árboles asoman, donde se visten los bosques de otoño y de viento. Mely Secas conoce esta vieja canción, la ha interpretado, la canta como nadie. Sabe de sus misterios. Con esa profunda voz, como la del clarinete, Mely Secas, explora las variaciones sutiles y recrea para nosotros una melodía nueva llena de resonancias antiguas. Desde esta nueva abstracción va perfilando con acordes medidos un paisaje de lucha. Con una potencia inusitada, Mely Secas ensaya en lo formal, alejándose del realismo impresionista con que plasma la naturaleza, y nos adentra en un mundo sugerente. Nada resulta fácil ante este paisaje. El color negro se utiliza como delicado hilo unitario y va imponiendo un tono sobrio a todas las obras que conforman esta serie, que bajo el título de Malpaís, es expresión del impacto visual que Lanzarote supo despertar en la artista.
Mª Eugenia Pérez Valcárcel